Si el cobrador se queja, es porque las leyes no sabe

Vivimos en un país emprendedor. Nuestro día comienza cuando aún el sol no sale. La ama de casa, el obrero del barrio, la joven secretaria, los escolares, los estudiantes universitarios, y todos aquellos peruanos luchadores, que van en busca de un futuro mejor se encuentran en el paradero de la esquina a la espera del micro que los llevara hasta su lugar de trabajo o centro de estudios.

Todos ya dentro de la combi, buscan un espacio donde acomodarse y tras empujones y pisotones, cuando ya te logras coger de algo –o muchas veces de alguien- llega la hora esperada, escuchas la voz melodiosa del señor cobrador diciendo: pasaje, pasaje, con sencillo, con sencillo – siempre repitiendo las palabras- y con una mano agarrándote en la manijas del micro o los mas afortunados que encontraron un asiento libre buscan dentro de su mochila, cartera, billetera o bolsillo las monedas suficientes para pagar su pasaje.

Calvario estudiantil

Y es aquí donde comienza el primer problema de los jóvenes estudiantes, sacan su carnet universitario y con sus monedas en la mano intentan pagar el medio pasaje, pero oh sorpresa, según nuestros amados cobradores eso no vale, regatean un precio que no sea perjudicial para los bolsillos del chofer y del cobrador o en casos ya mas complicados si no pagas el pasaje “completo”, te bajan.

Pero ¿Cómo todo esto es posible? Si existe la ley 26271, que norma el derecho a pases libres y pasajes diferenciados cobrados por las empresas de transportes urbano e interurbano de pasajeros.

La ley, es la ley

Los beneficiarios de los pasajes diferenciados son los escolares de nivel primario, secundario del país y los estudiantes de las universidades e institutos de educación superior, incluyendo los institutos tecnológicos y pedagógicos y/o escuelas de formación artística, tanto pública como privada y el uso de este en caso de los escolares solo procederá entre las 6:00 y las 22:00 horas en días laborales, mas los estudiantes universitarios, institutos, etc. Procederá entre las 5:00 y 24:00 horas, en días laborables y no laborables.

“No sabía que una ley nos amparaba, pensé que el precio de los pasajes los ponía la empresa. Como ya hay una tarifa pegada en el carro, teníamos que hacer caso a eso” nos dice, Katherine Matta, estudiante de primer ciclo de educación especial.

Pero eh ahí el problema con los tarifarios, ya que las empresas de transporte urbano e interurbano además de exhibir sus tarifas en un lugar visible del vehículo- y basarse en ellos para subir los precios como a ellos les plazca- conforme lo dispone e articulo 6º de la ley Nº26271, deberán comunicar a la autoridad municipal que les otorgó su autorización o concesión para la prestación del servicio, por cualquier medio escrito que permita dejar constancia de su recepción, el importe del pasaje adulto y de los pasajes diferenciados vigentes que deben pagar los usuarios, así como la estructura de costos que justifica dichos importes.

Pero entonces ¿porque siguen cobrando lo que quieren si antes de colocar su tarifario deben seguir ciertas normas? “Somos estudiantes universitarios, somos el futuro de nuestro país y tenemos el deber de luchar por nuestros derechos, pero no podemos si quiera informarnos sobre cuanto debemos pagar por viajar en un micro y que es lo que les pasaría a los que no acatan esta ley” expresa Ronaldo Valencia, estudiante de comunicaciones de quinto ciclo.

Y es que según el artículo 5º de la misma ley, se debe respetar el derecho a los pases libres o al pasaje diferenciado y si esto no se cumple el servicio de transporte urbano e interurbano será sancionado, con una multa, suspensión o cancelación de la autorización o concesión dada.

No todo es color de rosa

Si nos basamos en la ley, todo va viento en popa, pero vayamos a la práctica. Los tarifarios muestran precios que no corresponden. Según el reglamento, el pasaje universitario no debería pasar del 50% del precio del pasaje adulto, al igual que el de los colegiales no debería superar el 30% pero aun asi no se respeta el precio reglamentado. El horario en el que los estudiantes ya sean escolares o de nivel superior pueden aprovechar este beneficio, tampoco es respetado, pues nuevamente los cobradores y choferes cobran el monto que a ellos les conviene, pidiendo que por favor seas consciente pe’ varón.

Otro punto en contra es que las personas no están informadas sobre este tema, no muchos saben porque los precios tienen que ser rebajados o cuanto tienen que ser rebajados y por ende no pueden hacer valer sus derechos. Vemos a muchos policías en las calles -que por cierto ellos también son beneficiarios del pasaje libre al igual que los bomberos- y no podemos defendernos o reclamar las irregularidades dentro del medio de transporte.

Los jóvenes son el futuro del país o ¿no?

Vivimos en un país de mujeres y hombres luchadores, que hacen todo lo posible e imposible para salir adelante, nos unimos cuando vemos pisoteados nuestros derechos, y no soportamos que alguien nos arrebate eso que a punta de esfuerzos, lágrimas y sudor hemos conseguido. Nuestros padres ya hicieron lo propio para que podamos salir adelante, pero ¿No es momento ya de que los jóvenes dejen los celulares y los reproductores de música por un momento y se den cuenta de la realidad?

Ponle stop a las irregularidades y ponle play a los derechos que merecemos, tomate una selfie en tu país no con mejores reglas o leyes sino con jóvenes con más conocimiento sobre lo que se merecen. Entonces ¿Qué dices? ¿Te bajas de la combi o pagas el pasaje que te corresponde?